La transición de Cuba hacia la agricultura orgánica surgió como una
respuesta a una crisis: el colapso del bloque comunista soviético (su
principal proveedor de petróleo). Pero este problema dio pie al
desarrollo de un sistema de producción de alimentos saludables para la
población y ambientalmente sustentables que es un ejemplo mundial.
El sistema es objeto de un informe del Centro Schumacher para la Nueva Economía de Estados Unidos, que detalla
cómo la falta de fertilizantes y pesticidas químicos llevó a los
cubanos a explorar métodos orgánicos, y cómo la escasez de combustible
para el transporte a motor los impulsó a cultivar alimentos en las
ciudades.
En 2006, el Fondo Mundial para la Naturaleza
destacó a Cuba como el único país que cumple los criterios mínimos de
sustentabilidad. Greg Watson, responsable del reporte del Centro
Schumacher, afirma que el hecho de que el sistema orgánico no haya sido
impulsado en Cuba por preocupaciones ambientales no minimiza el papel
que este país tiene como líder mundial en la agricultura ecológica.
*Fuente: Discovery